Un fuego de leña abierto, crepitando y humeando. Un costillar de carne que chisporrotea y se carameliza a la perfección, el calor del fuego vivo imparte sabores que no se pueden obtener en el interior. Tu tienes el control total: la rueda se mueve sin esfuerzo para controlar la temperatura. Cuando el fuego es fuerte y caliente, y te atrae el olor a humo y carne cocinada, todo lo que sientes es el poder de la parrilla al estilo argentino. Descubra la tradición ancestral de la parrillada argentina.